Una mujer embarazada puede hacer ejercicio, hoy en día es más común ver mujeres embarazadas ejercitándose, pero antes de iniciar cualquier programa de entrenamiento es importantísimo que tengan la autorización de su médico.
Casos contra indicados
Existen casos especiales en donde está contraindicado, por ejemplo mujeres con placenta previa, problemas cardiovasculares, gestación múltiple, sangrado vaginal o historia de abortos espontáneos. Algunos otros casos deben ser evaluados por el médico antes de iniciar con un programa de ejercicio como casos de mujeres embarazadas con hipertensión, anemia, diabetes, problemas de tiroides, irregularidades cardíacas e incluso extremadamente sedentarias.
Tips para ejercicios en mujeres embarazadas
Teniendo “luz verde” por parte médica para ejercitarse durante el embarazo se deben seguir algunas recomendaciones:
Mantener la duración de sus sesiones de ejercicio por debajo de los 30 minutos.
Mantenerse bien hidratadas.
Evitar hacer ejercicio en lugares muy cerrados y húmedos.
Evitar el uso de ropa impermeable.
Evitar ejercicios en donde se esté sobre su espalda por mucho tiempo (por ejemplo abdominales).
Mantener un nivel de intensidad moderado, parar si se siente fatigada.
Prestar atención a cualquier sensación de malestar o incomodidad.
Cuidar su nutrición; una mujer embarazada requiere 300 calorías adicionales, si hace ejercicio debe cuidar que su ingesta calórica sea la adecuada, con suficiente cantidad de carbohidratos, nunca por debajo de sus necesidades.
Existe evidencia de que una mujer embarazada se puede beneficiar del ejercicio durante esta etapa; el ejercicio puede reducir el dolor de espalda, reducir estrés, ansiedad y depresión, además mejorar la digestión, tener mayor energía y habilidad para realizar sus actividades, incluso hay quienes afirman que les ayudó a tener una mejor labor de parto.
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